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20080208

Del Shannon | Runaway


Hace unos tres años estaba en un bar cuando, de repente, en una pantalla gigante de vídeo, comenzaron a pasar un reportaje de un antiguo artista al que conocía de forma un tanto vaga. El tema que comenzó a sonar me entró directamente por la vena y me removió las entrañas de forma incomprensible. Aquel sonido era como una especie de antropología de la memoria, como adentrarse en una gruta donde están escondidos los más preciados tesoros. Aquella música estaba relacionada con mis más remotos recuerdos. Mi mente retrocedió de forma involuntaria a los caballitos y los autos de choque. Del Shannon acababa de regresar a mi vida.

En el extenso desierto que hubo entre 1959 hasta la llegada de los Beatles en 1963, pocas cosas se salvaron de la quema. Los Rivieras, los Searchers, Chubby Checker... y poca cosa más. Se vivían tiempos de pop manejado por la industria. Del Shannon era un superviviente de los 50's que pese a ser un rocker con tupé había adaptado muy bien su música a los nuevos tiempos, habida cuenta el triunfo de los sonidos Tamla Motown.
Del Shannon no era un tipo agraciado. Medía tan sólo 1.56 cm y encima era paticorto. Pero en 1961 rompió las listas con Runaway, un tema que lo deben haber oído hasta los sordos. Por lo que a mi respecta, si tuviera un altar en casa estaría colocado por encima del crucifijo y el caliz. Más porque este pedazo de artista tuvo una vida desgraciada que le produjo constantes depresiones que le llevaron en 1990 a suicidarse de un disparo en la cabeza.